1.- Qué es y cómo funciona la radiestesia.
2.- Historia y futuro de la radiestesia.
3.- Preparación física y psíquica.
1.- Qué es y cómo funciona la radiestesia
La radiestesia es la facultad que posee el ser humano para percibir radiaciones. Mediante técnicas y disciplinas aplicadas a través de los siglos, ha alcanzado tal grado de desarrollo que permite realizar todo tipo de investigaciones, cualquiera que sea su naturaleza.
Nuestro organismo es un receptor que capta las radiaciones emitidas por otros cuerpos y por las diversas formas de energía tanto sensoriales como ultrasensoriales o astrales, gracias a lo cual se producen fenómenos como la telepatía, premoniciones,... etc. Los científicos no creen en la existencia de estas energías porque no han podido experimentar con ellas en el laboratorio, de ahí que afirmen que la radiestesia se trate de una pseudociencia. Sin embargo los yoguis vienen experimentando con las energías ultrasensoriales desde la noche de los tiempos.
Todo el conocimiento del universo está dentro de nosotros, la radiestesia es un método para conectarse a ese conocimiento y poder ayudar a quien lo necesite. Si la radiestesia se utiliza con fines egoístas entonces se va a cortar esa conexión y es muy difícil que funcione.
2.- Historia y futuro de la radiestesia
Antiguamente la radiestesia recibía el nombre de rabdomancia, palabra que deriva del griego rhabdos (vara) y manteia (adivinación), por lo que rabdomancia significa «adivinación por medio de una vara». La rabdomancia se usaba para detectar la existencia de vibraciones energéticas en el mundo exterior y debajo de la superficie terrestre. A quienes la practicaban se les llamaba rabdomantes o zahoríes, famosos por encontrar los sitios favorables para excavar pozos.
El uso de la rabdomancia es antiquísimo. Desde la antigüedad, a la rabdomancia se le ha dado diferentes utilidades dependiendo de la cultura y de las circunstancias del momento, así por ejemplo los romanos la utilizaban para buscar aguas termales, también se usó como método de adivinación.
Hasta 1890 compitieron el péndulo y las varillas como instrumentos para la detección de radiaciones, pero, a partir de ese año, como resultado de la experimentación con numerosos pacientes, el rector de la Universidad de Saltzburgo instituyó oficialmente el uso del péndulo como instrumento de diagnóstico médico; desde entonces se redujo el empleo de las varillas
En 1933 la Academia de Medicina de París organizó en Avignon un congreso al que se invitaron a todos los profesionales que venían investigando y trabajando con la rabdomancia, su finalidad era que cada cual aportara la información que permitiera entregar al mundo científico una herramienta certera para la aplicación de la rabdomancia. Con el reciente descubrimiento de las radiaciones, en aquel congreso se expuso que toda forma de vida (humana, animal, vegetal o mineral) así como cualquier cosa creada por el hombre, contiene vibraciones en correspondencia con una gama de colores, sonidos y un amplio espectro electromagnético, por lo que la vibración es una expresión de la vida en sus diferentes niveles y grados de densidad. Fue un asistente, el abate Alexis Bouly quien propuso ante los congresistas cambiar la denominación de rabdomancia por la de radiestesia, lo cual fue unánimamente aprobado. Este abate fundó la Sociedad de Amigos de la Radiestesia.
El nombre de radiestesia está formado por la palabra latina radius, que significa radiación, y por el vocablo griego aisthesis que significa percepción (de los sentidos) en su acepción de ‘capacidad de sentir’. Se llamó radiestesista al practicante de la radiestesia.
La radiestesia fue reconocida formalmente en Europa por los ejércitos beligerantes de la I Guerra Mundial para localizar minas. Después de la I Guerra Mundial se ha observado una tendencia al crecimiento acelerado del número de radiestesistas. En la II Guerra Mundial se ha utilizado la radiestesia para buscar submarinos...
Algunos investigadores de este fenómeno consideran que en un futuro relativamente cercano, aproximadamente el 90% de los seres humanos llegarán a utilizar la radiestesia. Por otra parte, estas predicciones establecen que el 50% de las aplicaciones serán de naturaleza científica y tecnológica.
3.- Preparación física y psíquica
La mayor parte de las personas que vivimos en el ámbito de la cultura occidental, hemos desarrollado predominantemente las funciones racionales que lleva a cabo el hemisferio izquierdo del cerebro, como consecuencia de ello se han inhibido las funciones psíquicas que corresponden al hemisferio derecho, por lo tanto somos más racionalistas y menos perceptivos e intuitivos.
En nuestra cultura se considera que la intuición, la imaginación, la subjetividad y el sexto sentido, no son formas válidas para obtener conocimientos y, por lo tanto, se reprimen desde la infancia. Consecuentemente no desarrollamos suficientemente las funciones que podríamos realizar con el hemisferio cerebral derecho, entre las que se encuentra la radiestesia.
Todos tenemos un sexto sentido y una capacidad potencial para tener sensaciones extrasensoriales, pero una gran parte de la población nunca llega a desarrollarlos significativamente. Esto explica porque unas personas tienen más facilidad que otras para usar el péndulo, varillas u otros instrumentos radiestésicos.
Aquellas personas cuyo hemisferio cerebral derecho se ha desarrollado adecuadamente, tienen el “don” para practicar la radiestesia. Pero de cualquier manera, la radiestesia tiene que aprenderse y requiere entrenamiento y perseverancia para su dominio total con el fin de captar las radiaciones emitidas por nosotros mismos y por los cuerpos y formas de energía que nos rodean.
La radiestesia facilita detectar conscientemente lo que es inconsciente, lo cual se logra a través de la intuición y de un sexto sentido, es el ejemplo de las percepciones extrasensoriales y de otras funciones del hemisferio cerebral derecho que la ciencia ha empezado a explicar en los últimos años, pero que han sido ejercidas por los seres humanos desde el origen de la especie.
4.- Instrumentos
La radiestesia capta las acciones a distancia mediante varios tipos de instrumentos:
A) Péndulos
Los péndulos son instrumentos de conocimiento que funcionan independientemente de sus características físicas, por lo que pueden ser construidos con cualquier material. Requieren un corto entrenamiento para su manejo.
Péndulos magnéticos:
Cuando se hace una medición muy precisa sobre una escala o un plano, el campo magnético de la Tierra afecta a las lecturas, por eso si hacemos una medición estando parados y con cierta orientación, obtenemos una lectura, y si cambiamos nuestra orientación y repetimos la medición, nuestra lectura será distinta.
Para anular este efecto hay que neutralizar el campo magnético terrestre, para ello se aloja un imán dentro del cuerpo del péndulo, o bien se toma un magneto -preferentemente de alta densidad- en la misma mano con la que se sostiene el péndulo.
Péndulos con punta en el extremo inferior:
Si se requiere hacer mediciones muy precisas, la punta facilita la lectura sobre las escalas de medición.
Péndulos con recipiente interior para alojar testigos:
En el caso de que no esté presente la persona que vas a buscar o analizar, deberás poner dentro del péndulo un testigo de ella, es decir una fotografía, un mechón de su cabello, un papel con su firma, su huella digital, su carta astral, saliva en un algodón envuelto en una bolsa de plástico, o un papel en el que se escriban sus datos personales, tales como nombre completo, sobrenombre, signo astrológico, lugar y fecha de nacimiento, dirección, etc. Esto funciona de forma similar al buscar mascotas, animales u objetos perdidos (como un coche o una prenda de vestir, por ejemplo).
En estos instrumentos es recomendable que el testigo se envuelva dentro de una bolsa muy bien cerrada, con el objeto de que los péndulos no queden contaminados permanentemente y de que las lecturas posteriores no sean erróneas.
Como observación diremos que los péndulos se pueden utilizar en combinación con unas tarjetas que se usan en radiestesia, las cuales están diseñadas para proveer escalas útiles al usuario.
B) Varillas y horquillas
Las varillas se usan para detección en terrenos, casas y edificios. Pueden determinar la localización de agua, objetos perdidos o tesoros. También se han usado exitosamente para detectar petróleo y minerales para extracción.
Una aplicación particularmente útil es definir la ubicación de radiaciones nocivas y geopatías en casas y negocios. También se usan para detectar bloqueos energéticos en personas.
C) Instrumentos eléctricos para detección
Medidores de campos eléctricos, electromagnéticos, radiactividad,...